KTM X-BOW GT-XR: ¿el coche de carreras de calle más brutal de la historia?
Pesos ligeros
A algunos entusiastas de los coches no les interesan, a otros puedes levantarte de la cama en mitad de la noche por ellos: deportivos ligeros homologados para la calle. Piensa en los biplazas de, por ejemplo, Lotus, Caterham, Donkervoort, Ariel Motor Company, Dallara, etc. KTM también pertenece a esta lista, aunque puede que conozcas la marca austriaca principalmente por sus motos.
KTM X-Bow
Sin embargo, la marca también produce coches, concretamente el X-Bow, desde 2008. Con el coche, la marca celebró su 50º aniversario en ese momento. Ahora, más de 14 años después, el fabricante presenta el coche de calle más extremo que ha hecho nunca: el X-Bow GT-XR. El coche de calle extremo es muy similar a los coches de carreras GTX y GT2 que la empresa austriaca también construye.
X-Bow GT-XR
La base del X-Bow GT-XR consiste en un monocasco de fibra de carbono y un bastidor tubular de acero, lo que hace que el coche pese sólo 1.130 kilogramos. No se necesita mucha potencia para conseguir unas prestaciones impresionantes, pero KTM incorpora el conocido cinco cilindros soplado de 2,5 litros de Audi a este monstruo de competición homologado para la calle. Además, también le han hecho cosquillas al bloque. El resultado son 500 CV y 581 Newton metros, que van a parar a las ruedas traseras a través de un cambio automático DSG de siete velocidades y un diferencial de deslizamiento limitado. El austriaco necesita sólo 3,5 segundos para el 0-100 y tiene una velocidad máxima de 280 km/h.
Conductor diario
Sobre el papel, el nuevo X-Bow parece el juguete definitivo para la pista, pero según el fabricante, también es un perfecto conductor diario, gracias a su gran depósito de combustible de 96 litros (¡!), a la dirección asistida eléctrica progresiva y al sistema de elevación hidráulica, que hace que los badenes dejen de ser un obstáculo. Entrar también es más fácil que con muchos coches superligeros. Todo el techo puede abrirse hacia delante, lo que facilita el hundimiento en un asiento.
Monstruo de circuito con artículos de lujo
El GT-XR es menos duro que el X-Bow original de 2008 en muchos aspectos. Ni siquiera tenía techo, mientras que la última creación de KTM tiene incluso aire acondicionado y un sistema de audio con bluetooth. Pero no te equivoques, el GT-XR sigue siendo digno de la pista. Se puede ver inmediatamente, si se observa el enorme alerón trasero, el difusor trasero y el splitter delantero. El suelo del coche está diseñado para maximizar el efecto suelo, al igual que los actuales coches de Fórmula 1. Los clientes que realmente quieran llegar al máximo en la pista también pueden marcar los frenos carbono-cerámicos de la lista de opciones. La suspensión del coche es de Sachs y las ruedas con bloqueo central también son una opción.
KTM espera construir sólo 100 unidades al año y el precio de salida es de 285.000 euros en Austria. Todavía no está claro si vendrá a los Países Bajos.
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