Fondo

10 consejos invernales: así se sale más rápido a la carretera por la mañana tras una intensa helada nocturna

enero 4, 2024

1. Rocíe las gomas de las puertas con spray de silicona o frótelas con vaselina.

Dale un poco de amor a las gomas de tus puertas con un spray de silicona o una generosa dosis de vaselina. Rociarlas o frotarlas evitará que se congelen cuando el mercurio descienda muy por debajo de cero. Este sencillo truco te permite abrir la puerta sin esfuerzo por la mañana y, además, así las gomas de la puerta durarán mucho más. Repite este truco con regularidad para una protección óptima durante la temporada de invierno, pero por supuesto también puedes hacerlo sólo cuando empiece a helar.

2. Evite que se congele la cerradura de la puerta con spray de teflón o WD40

Evite que la cerradura de la puerta se congele con un sencillo truco: rocíe un poco de spray de teflón en la cerradura de la puerta o recurra al clásico WD40. Esta inteligente acción preventiva evita que la cerradura de tu puerta se congele, para que no tengas que apoyarte en ella a primera hora de la mañana con una bolsa de agua caliente en el culo. También para este consejo, asegúrate de repetir este tratamiento periódicamente. Así siempre tendrá garantizado un acceso sin problemas a su coche, incluso con el frío más intenso.

3. No laves el coche justo antes de que empiece a helar

El momento lo es todo: no le des a tu coche un día de spa si se han anunciado heladas. Eso es buscarse problemas. El agua entra en todos los rincones y grietas durante un lavado a fondo. Esto crea hielo en los lugares más incómodos. Así que evita acabar como una escultura de hielo y dale a tu todoterreno ese merecido brillo en una época en la que las temperaturas son algo más suaves.

4. Poner una lámina o película sobre el parabrisas

Cangrejos, ¡quién no los odia! Evite que se congelen los cristales colocando estratégicamente una lámina o una película sobre el parabrisas. Sujeta convenientemente los extremos entre las puertas para que no se vuele todo. Vale, conocías este consejo, por supuesto. Pero hay algo en lo que quizá no hayas pensado: ¡los limpiaparabrisas! La gente suele dejarlos debajo de la tela, lo que significa que siguen congelándose contra el parabrisas si están un poco húmedos. Como resultado, a la mañana siguiente tendrás que ponerte encima del coche como un acróbata para retirarlas con cuidado del parabrisas. Consejo: asegúrese de que los limpiaparabrisas descansan sobre la parte inferior de la lona. ¡Voilà! Este ingenioso truco no sólo le ahorrará la molestia de los arañazos, sino también un juego de limpiaparabrisas nuevos.

5. Limpiar a fondo las ventanas interiores

No dejes que se empañen los cristales del coche y limpia a fondo el interior. Puede parecer una medida obvia, pero unas ventanillas del coche limpias reducen considerablemente las posibilidades de que se produzca la molesta condensación. Tómese esos pocos minutos extra para eliminar la suciedad y los depósitos para no tener que salir a la carretera por la mañana medio a oscuras y con poca visibilidad. Limpia los cristales con un paño de cocina o de microfibra. Los limpiacristales, como Glassex, suelen ofrecer resultados sin rayas.

6. Un calcetín con arenilla de gato evita que se empañen los cristales

No dé oportunidad a la humedad y mantenga limpios los cristales de su coche con arenilla para gatos. La arenilla para gatos es el mejor absorbente de humedad y una poderosa arma contra los cristales empañados. Coloque un calcetín lleno de este material en algún lugar de su interior y absorberá automáticamente la humedad presente, reduciendo significativamente las posibilidades de condensación no deseada. No sólo es una solución inteligente, sino también una forma económica de combatir los problemas de humedad en el coche.

7. No ponga en el coche un rascador de parabrisas ni un descongelador de cerradura.

Puede sonar a puerta abierta (jaja): guarda el rascador del parabrisas y el desempañador del cierre fuera del coche cuando empiece a helar. Se sorprenderá de lo a menudo que se pasa por alto. No guardes estas herramientas imprescindibles para el invierno en el propio coche, porque si las puertas están heladas, te serán de poca utilidad. Colócalos en un lugar de fácil acceso, como un armario junto a la puerta de entrada.

8. Descongelar el parabrisas con una franela con sal

¿No ha leído el consejo 6 y su interior está húmedo? Entonces existe la posibilidad de que el parabrisas se congele no sólo por fuera, sino también por dentro. ¿Ahora que? Sencillo, llena una franela con un poco de sal, humedécela y trata con ella la ventana congelada por dentro. La sal acelera el proceso de descongelación y también evita que la ventana se vuelva a congelar rápidamente. Ventaja adicional: la sal también ayuda a mantener la ventana limpia durante más tiempo.

9. Retire la nieve del tejado

Si se acumula nieve en el tejado, tómate tu tiempo para quitarla. ¿Por qué? Si tienes que frenar bruscamente, lo más probable es que la nieve se deslice por el parabrisas y no veas nada. No serás el primero en causar un accidente así. Así que no te dejes sorprender por una repentina lluvia de nieve y coge una pala para nieve o un cepillo y retira la nieve del techo de tu coche.

10. Evite los resbalones invernales. Pon a prueba tu distancia de frenado

Antes de salir a la carretera, tómese un momento para realizar una rápida comprobación de seguridad. Pise brevemente los frenos con firmeza para ver si la carretera no está traicioneramente resbaladiza. Una breve prueba de frenado puede marcar la diferencia entre una conducción suave y un deslizamiento inesperado.

Mira también:
El VE en los deportes de invierno (VÍDEO)