ING: La incertidumbre sobre el impuesto de circulación frena las ventas de coches eléctricos

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Cada vez son más los que apuestan por la conducción eléctrica. En 2022, los particulares aún tenían una cuota del 45% de las compras de coches eléctricos, pero en 2023, esa tendencia ha disminuido. Parece que esto no cambiará en 2024. ING señala a la falta de claridad en torno al impuesto de vehículos de motor como uno de los culpables.

Impuesto sobre vehículos de motor

Actualmente, los coches eléctricos siguen disfrutando de una exención fiscal. Por desgracia, la fiesta se acaba a partir de 2026, y eso va a perjudicar a los bolsillos de los entusiastas de los coches eléctricos. En ese caso, tienen que pagar anualmente entre 200 y 500 euros más de MRB que los conductores de gasolina, lo que supone un sobrecoste de alrededor del 60%.

Dudas

Además, el mantenimiento de la bonificación del impuesto especial sobre la gasolina no contribuye al paso a la conducción eléctrica en 2024. La política actual de los Países Bajos parte de la base de que la electrificación continuará por sí sola a partir de 2025, pero existen dudas de que esto vaya a ocurrir realmente. Para los particulares, actualmente resulta atractivo seguir conduciendo sus coches de gasolina durante un tiempo más, según ING.